Juana Roig, la menor que pilotó la venta ‘online’ de Mercadona con un lema: «Vendiendo lechugas desde 2018» | Compañías

Es la hija menor de Juan Roig, cofundador y presidente de Mercadona. Juana Roig Herrero (1984) saltó el martes a la primera línea de la actualidad empresarial y económica española de una formada a tanto inocente. Con un entrevista concedida al podcast Itnig, Juana Roig rompió con una de las señas de identidad tradicional de la firma, no concedió entrevistas a los medios de comunicación, y decidió revista a todos los elementos de actualidad del spin-off’ de Mercadona que dirige desde 2017; Mercadona Tech, la división del líder de los supermercados en España gestora de la venta online del candado.

Casada y madre de una niña, Juana Roig, graduada en Administración y Dirección de Empresas, formada en otros grandes imperios españoles y aficionada al ballet, al Villarreal CF, equipo de fútbol propiedad de su tío Fernando Roig, y al running, no eludió ninguna pregunta de los dos periodistas que la entrevistaron. Cierto que no se salió en ningún momento del guion tradicional marcado por su padre para referirse a temas internos de la compañía y de la familia propietaria, pero solo el hecho de que lo hizo levantó enseguida la expectativa por todo lo que rodea a su padre, Juan Roig.

De momento, su tarea hasta aquí no ha sido fácil. En 2017, la junta directiva de la esclusa encargó cambiar lo que por aquel entonces su propio padre había calificado como «una mierda».

Su tarea inventará un moderno modelo de venta online que competirá con la experiencia de ir a tienda de la compañía y enderezar el rumbo de una actividad que, antes de su llegada, generaba a la empresa unas pérdidas de 40 millones de euros anuales y solo representaba el 1% de sus ventas. Con el alieno y control de su padre muy cerca. «Hacer una web better que la que tenemos no es muy difícil», que critiqueba la apariencia y el funcionamiento de la antigua web de Mercadona, tras el anuncio de su actualización en 2016.

Hoy, según la propia página web de Mercadona Tech, Juana Roig dirige un equipo de 180 profesionales tecnológicos y coordina el trabajo de más de 2.000 personas que es posible que pinchen en la página web para recibir la compra en caso de un día después, confirmando el lema que ha hecho escribir y colgar en uno de los techos de las oficinas de la filial tecnológica: “Selling lechugas since 2018” (Vendiendo lechugas desde 2018, en su traducción al castellano).

Y su invento, y el de sus colaboradores, tal y como definió a su equipo, se sometió inmediatamente con éxito al reto profesional más importante que ha tenido desde un puesto de gestión. Surfear con brillantez la reclusión domiciliaria de sus clientes durante los años de la pandemia y por ende la compra masiva desde casa.

Y ahora, en medio de un proceso de inflación galopante y una pérdida repentina de alimentos tanto tiempo como nadie ve, es infrenta al reto de convencer a los clientes de que compensar pagar algo más de siete euros para que te lleven la compra a casa antes que ir directo a la tienda.

Antes de todo esto su experiencia profesional se limitaba a una modesta actividad en el mercado de la joyería y varios años en Inditex, bajo la tutela de Amancio Ortega.

Su nombramiento hace cinco años para dirigir la apuesta tecnológica de Mercadona hizo qu’immediatamente se la colocara como candidata futura a sustituir a su padre, cuando este decidera jubilarse.

De hecho, un movimiento, hace un par de años en Herrecha Inversiones, la patrimonial en la que su madre y esposa de Juan Roig, Hortensia Herrero, concentró el 29,58% del acionariado de Mercadona, abonó esa suposición, nunca confirmada ni por la empresa ni por su propio padre.

Hortensia Herrero decidió abandonar el modelo administrativo único de su empresa y designar un directorio en el que sus cuatro hijas pasaron a desempeñar el puesto de consejeras.

Además de este puesto en el consejo de Herrecha Inversiones, Juana Roig también es consejera de Mercadona y formó parte de la comisión de auditoría del consejo de administración. Con lo que, en teoría, Juana Roig acercaba y encajaba un poco más en el perfil de sucesora. A camino que, guardando todas las distancias, se parece al que también encargó de recorrer Marta Ortega cuando el proceso de sustitución de su padre, Amancio Ortega, como primer ejecutivo de Inditex.

Ella lo sabe. De hecho, en la entrevista en el citado podcast, a la pregunta de si llegó el momento se postularía como presidenta de la compañía, se permitió el lujo de abandonar por unos segundos el guion que para estos casos marca la ferrea disciplina de Mercadona, y con una mirada al techo acompañándola de un profundo suspiro aseguró: “¿Me gustaría? (ser presidente). Pues cuando llegue ese momento veremos. Mercadona es un gran desafío”.

Non es un sí, pero tampoco es un absoluto no. Un poco que se permite mostrar antes de volver al mantra de la empresa: «En Mercadona la propiedad se hereda, pero la gestión no». Un detalle que sin duda se analizará cuando surja el tema de la sucesión de su padre (Roig tiene en la actualidad 73 años) en la tarea de vender lechugas online y «llenar la tripa de los jefes», término con el que en Mercadona se identificar a los clientes.

Aunque por el momento, «y esperemos que por mucho tiempo», tiene muy claro su papel. Define a su padre como un toro y reconoce que «todo el mundo que te ve, no te ve a ti, ve a la hija de…. Pero es algo de lo que no me quejo, todo lo que he hecho en Mercadona online lo il hecho porque tenía ese apellido. Te aprovechas también un poco de ese poder bien utilizado”.