La creación de empleo en febrero confirma la fortaleza del mercado laboral en EE UU y complica la tarea de la Fed | Economía

Después del susto de enero, cuando el mercado laboral desapareció por sorpresa en vez de frenarse, como esperaban los analistas, todas las miradas estaban puestas este viernes en la publicación de los datos de empleo del mes de febrero. A un ritmo más suave que enero, pero también por encima de las previsiones, el mes pasado creará 311.000 puestos de trabajo, ha informado el Departamento de Trabajo. La tasa de empleo sufrió al 3.6% desde el 3.4% de enero, la más baja desde 1969. La buena racha complica el empeño de la Reserva Federal para contener la inflación pertinaz.

En Francia, la generación de 517.000 puestos de trabajo desbordó todas las previsiones de los analistas, que se cifraban en 185.000. La previsión mediática para febrero fluctuó entre 200.000 y 215.000.

El aviso, esta misma semana, del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, de que la fortaleza del mercado laboral podría empujar a la Fed a adoptar medidas más estrictas para contenter la inflación es sólo la mitad de la información que el banco central de EE UU necesita para aumentar el ritmo de subida de tipos. Con los datos de febrero en la mano, la información restante se conocerá la semana próxima, con la publicación de los datos del IPC de febrero. La decisión de la Fed se adoptará en la reunión de su comité de política monetaria, o Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, en sus siglas inglesas), los próximos 21 y 22 de marzo.

El poder del mercado laboral estadounidense se explica por factores estructurales, como la incorporación masiva de mujeres a la población activa tras la pandemia, una vez superados obstáculos como el cierre de las guarderías y colegios. Las mujeres han ganado más empleos que los hombres Durante cuatro meses consecutivos, incluido enero, hasta representar más del 49,8% de todos los empleos no agrícolas. Las trabajadoras habían superado por última vez a los hombres a los hombres de 2019, antes de que la pandemia dejara sin empleo a casi 12 millones de mujeres, frente a 10 millones de hombres. La incorporación masiva femenina es impulsiva en el sector servicios, fuente subyacente de la fortaleza de la economía, y responsable en gran parte de la presión alcista de los precios.

Prueba de que la economía se está adaptando a las fuertes subidas de tipos del año pasado es la brusca caída de las ofertas de empleo en el sector de la construcción, con un descenso de casi el 50% de diciembre a enero, según informaba este jueves el portal Mercados Axios. Se trata del mayor descenso mensual en el sector en 20 años y es consecuencia directa de la subida del precio del dinero, actualmente en la horquilla del 4.5%-4.75%, qu’encarece los creditos hypotecarios. Menos empleos en el sector, combinados con el descenso de la inversion en construction residenty y otros indicadores de la actividad inmobiliaria, sugiriendo una desaceleración paulatina, demasiado lentamente tal vez para los objetivos de la Fed.

Las previsiones de las economistas de Pimco, Allison Boxer y Tiffany Wilding, tienen más probabilidades de ser ciertas. “Esperamos un aumento de 300.000 nóminas frente a las 215.000 de consenso” (de media), apuntaban en vísperas de la publicación del informe de febrero. Las expertas señalaron, entre otros riesgos alza, los factores estacionales, en beneficio del sector minorista, así como «la probabilidad que el aumento de los anuncios de despidos que se produjeron en enero [despidos a gran escala en las tecnológicas] no apareció en el informe de empleo hasta marzo o abril”.

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