mayo 9, 2024

Seigeng Noticias

Panorama Internacional | Últimas noticias, Tendencias y activismo

La inflación se desaceleró al 3,3% en marzo, su nivel más bajo en un año y promedio | Economía

5 minutos de lectura

La inflación se da la vuelta con fuerza. Tras dos meses acelerando, los precios frenaron en marzo al 3,3%, según el dato adelantado publicado este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El giro no supone una sorpresa, aunque sí su intensidad, mayor a la esperada. En la cifra resulta decisiva el denominado efecto base: al tratarse de un dato interanual, en el que se comparan los precios con los de marzo de 2022, el primer mes completo de guerra en Ucrania, cuando la electricidad, el gas y el petróleo se dispararon descontrolados ante la incertidumbre sobre el suministro ruso, el saldo es favorable. A ello se une que en los últimos 30 días se ha abaratado la energía, con descensos en el petróleo y el gas por el temor a una recesión derivada del shock bancario y su consiguiente restricción en el credito; así como nuevas rebajas en la electricidad, en un entorno propicio para la generación eólica por las rachas de viteo y de menor consumo por unas temperaturas inusualmente altas. La inflación subyacente, en cambio, se mantiene elevada, en el 7,5%, una décima.

El retroceso del IPC frente a febrero, cuando estaba en el 6% de la tasa interanual, no basta para alcanzar el objetivo del 2% del Banco Central Europeo, pero llevaba poco más de un año y medio, desde agosto de 2021, sin acercarse tanto . Eso no implícito que los precios bajen —suben cuatro décimas en términos mensuales, según el INE— ni que sean más baratos que hace un año, solo que suben menos, aunque ese es el primer paso para atajar el problema.

Los expertos advierten que la caída, por 2,7 puntos, una de las más importantes de la serie histórica —no había bajado tanto en mes desde mayo de 1977—, no implica el fin de las presiones inflacionarias, y el dato es esperanzador, aunque ven prematuramente hablar de un cambio de tendencia definitiva. «Tiene algo de espejismo, porque el IPC subyacente sigue elevado, y en los próximos meses el efecto base, aunque seguirá ayudando a desacelerar la inflación, no lo hará tanto como en marzo», explica Leopoldo Torralba, economista de Arcano. La diferencia de 4,2 puntos entre la inflación subyacente -que excluye energía y alimentos frescos, los elementos más volátiles- y la general es la mayor de agosto de 1986, cuando el INE intentó calcular la primera de ellas.

En términos similares habló Ángel Talavera, economista jefe para Europa de Oxford Economics. “Esto no debería hacernos creer que las tensiones inflacionarias han terminado. The subyacente y la de alimentos van a seguir altas, y además, la gran caída de los precios de la energía en los últimos meses del año pasado va a provocar el efecto contrario al de marzo en la inflación de los últimos meses de 2023″, acertar. El precio de los alimentos repuntó en febrero más de un 16 % pese a las rebajas del IVA aprobadas por el Gobierno para ciertos productos básicos, erigiéndose en la principal preocupación de l’Ejecutivo, pero habrá que esperar dos semanas para conocer su evolución de marzo .

Fuentes del Gobierno destacan que el frenazo de la inflación, casi tres veces más baja ahora que el año pasado por estas fechas, está permitiendo a las empresas ser más competitivas en el exterior. «La bajada sostenida del precio de la electricidad, gracias a la solución ibérica y al resto de medidas adoptadas, ha sido clave para que la inflación española se situúe entre las más bajas de Europa», afirman.

The condition of Russia de potencia exportadora de crudo y gas alteró los mercados energéticos el año pasado con una intensidad inusitada. El petróleo Brent, por ejemplo, cerró marzo de 2022 a media de 117 dólares el barril. Este curso el escenario ha cambiado: a corto plazo ha desaparecido el miedo al desabastecimiento —las reservas de gas cerraron el invierno en máximos históricos—, y Europa ha encontrado nuevos proveedores para suplir el vacío dejado por Moscú. El precio del petróleo es además muy dependiente del ciclo económico. La reapertura de China tras su restrictiva política de covid cero fomentó la idea de que la demanda de combustible aumentaría, y con ello los precios remontarían, pero finalmente no ha sido así. Hay otras fuerzas en juego, y la perspectiva de un crecimiento escaso o incluso negativo ha déinflado este mes el Brent por debajo de los 80 dólares de medios.

En dos semanas, cuando salga el dato definitivo, se conocerá como ha sido la evolución de los combustibles, la energía eléctrica, los alimentos y el resto de componentes con los que se elabora el índice de precios al consumo. Según cálculos del Instituto Complutense de Análisis Económico, las caídas en la energía serán unánimes: la gasolina se reduce un 12,9%, el gasóleo un 15,5% y la electricidad un 51,1%, lo que tendría un resultado decisivo para el buen comportamiento de marzo.

Esa distorsión estadística marcará lo que queda de año. Aunque hay otros factores de los que estar pendientes. El euro, muy débil en los últimos tiempos, ha recuperado terreno. Es importante que el coste de la energía se pague en dólares, para que un euro en horas bajas encarecía la billura de los pays de la moneda única, y uno alza las abarata. El bum del turismo, que encarra la Semana Santa con el objectivo de igualar los niveles prepandemia, afrontó la temporada de verano con optimismo, puede dificultad el aterrizaje de los precios.

Sigue toda la información de Economía allá Comerciantes fr Facebook allá Gorjeoo desnudo boletín semanal

Horario Cinco Días

Las citas económicas más importantes del día, con las claves y el contexto para escuchar su alcance.

RECÍBELO EN TU CORREO

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Copyright © Todos los derechos reservados. | Newsphere por AF themes.